Itaisha vino a vernos porque hacía fermentados a pequeña escala, que empezaba a vender en cooperativas de consumo. Quería escalar su negocio y buscaba impactar con el etiquetado. Tenía claro que quería destacar el lado “más salvaje” de su fermentación.
Diseñamos un logotipo que “fermenta” en sí mismo, explicando el propio proceso de los productos. Este logotipo cambia de color según los productos que acompañe.Además del logo y las tarjetas, diseñamos un salvaje universo visual, que se plasmó en un par de piezas básicas para empezar con 2 productos (remolacha y zanahoria)… ¡Estamos deseando verlos ya en sus botes!